domingo, 30 de septiembre de 2018

Sopa de pollo y verduras (para tres personas):

Más improvisación en la cocina :) 
Llenamos la cazuela con tres tazones de agua, una cucharada rasa de sal gruesa, medio pimiento verde grande troceado, medio puerro mediano lavado y troceado también, y tres muslitos de pollo (la parte inferior del muslo del pollo). Hervimos a fuego medio-alto durante treinta minutos, retiramos los muslos en un plato, y reservamos el resto de la sopa. A continuación freímos en una sartén con poco aceite a fuego medio-bajo dos ajos medianos laminados. Una vez fritos echamos una cucharada de perejil, otra cucharada de curry y dos rebanadas de pan seco. Mezclamos todo bien y lo añadimos a la cazuela. Dejamos cocer a fuego medio durante veinte minutos… ¡Y listo! Como opción podéis retirar la carne de los muslitos y mezclarla con la sopa una vez servida.



sábado, 22 de septiembre de 2018

Acelgas con merluza (para dos comensales):

Hoy otro de mis inventos que me gustó como quedó. 
Echamos entre ocho y diez cucharadas de aceite de oliva en una sartén o cazuela baja grande, más cuatro vasos de agua, cuatro cucharadas de sal gruesa rasas, dos pizcas de nuez moscada rallada y dos ajos. Ponemos a fuego alto y cuando comience a hervir añadimos la ración de acelgas (ya lavadas y troceadas). Una vez comience a cocer de nuevo, colocamos dos trozos de merluza de cuatro dedos de largo cada uno, el lado que tiene piel debe estar en contacto con las acelgas. Echamos por encima a los lomos de pescado una pizca de sal y orégano.  Dejamos cocer a fuego medio veinte minutos y después con la merluza boca abajo cinco o diez minutos. Escurrimos en un colador con cuenco para guardar el caldo y usarlo para cocinar arroz otro día. Y servimos las raciones con un chorrito corto de vinagre de vino blanco.


viernes, 7 de septiembre de 2018

Muslos de pollo con verduras y canela (para tres o seis comensales):

Bueno, esta es otra receta con pollo, pero muy distinta. Un experimento que resultó bastante apetitoso también. 
Troceamos: una cebolla roja mediana, dos pimientos pequeños y carnosos de cada color (rojo, verde y amarillo), y un tomate mediano más otro medio. Por otro lado, retiramos las plumillas que puedan tener los seis muslo que vamos a cocinar (serviremos dos o uno por persona). Añadiremos un tercio, del típico vaso de agua, de aceite de oliva en una cazuela grande y baja. Encendemos el fuego y en cuanto se caliente la cazuela lo bajamos a fuego medio, dejando los muslos diez minutos por cada lado. Luego echamos la cebolla y la dejamos otros diez minutos con la tapa puesta, para después añadir los pimientos y el tomate dejándolo otros diez minutos con la tapa puesta también. Vertemos una rama de canela, un vaso de vino blanco, y media pastilla de caldo de pollo desmigada. Dejamos tapado otros diez minutos, y dejamos otra media hora más destapado (a fuego medio).  Una vez hecho retiramos del fuego y reservamos. 
En la segunda parte, pasamos por la plancha a fuego medio-alto las láminas de calabacín, berenjena y los pimientos del piquillo. Por cada montoncito necesitaremos: dos láminas de berenjena, dos de calabacín y un pimiento del piquillo. Corresponderían cuatro montoncitos por persona  por lo que para tres comensales necesitaríamos: veinticuatro láminas de berenjena, otras veinticuatro de calabacín y dieciséis pimientos del piquillo.


viernes, 31 de agosto de 2018

Ensalada con pechuga de pollo y champiñones a la plancha (para una persona):

Aquí va otro de esos experimentos que hago y quedan bastante bien. 
Cortamos dos lasca de cebolla blanca, un tomate mediano troceado, dos hojas grandes de lechuga de iceberg cortadas en cachitos con las manos, una tostada de pan integral troceada con las manos también. Pasamos por la plancha a fuego medio-bajo y con poco aceite, un filete de pechuga de pollo con una pizca de sal. Dejamos que se fría por ambas caras bien para evitar salmonella. Y luego freímos a la misma temperatura y con muy poco aceite, tres champiñones medianos cortados en láminas un poquito gruesas. Troceamos el filete y los champiñones en cuadraditos y los añadimos a la ensalada. Echamos dos cucharadas de mayonesa, unas pizcas de sal, seis gotas de Tabasco, un chorrito de vinagre de Módena de vino tinto, un chorrito de aceite de girasol, y unas pizcas de pimientas molidas. Mezclamos bien y listo.


sábado, 11 de agosto de 2018

Muslo de cordero con verduras al horno (para tres comensales):

Bueno, ahí va otra receta improvisada que quedó bien, inspirándome en el aliño para la carne en uno mucho más sencillo que usaba uno de mis abuelos en los filetes de hígado. 
Primero colocamos la bandeja alta del horno en un sitio que nos resulte cómodo para ir colocando los ingredientes. Y según vamos teniendo los siguientes ingredientes cortados en gajos o rodajas los colocamos en el mismo orden en la bandeja del horno: cuatro patatas medianas (previamente lavadas, peladas y lavadas de nuevo), una cebolla mediana, un puerro mediano (pelado y lavado después de cortarlo en rodajas), y dos manzanas medianas. Echamos por encima con cuidado un vaso de agua, una lata de cerveza y dos cucharadas rasas de sal gruesa. 
Calentamos el horno a doscientos grados centígrados, mientras ponemos el muslo de cordero en el centro de la bandeja, encima de las verduras. Realizamos cuatro o cinco cortes en la pieza de carne un poco profundos. Ahora hay que preparar el aliño para la carne con: ocho dientes de ajo pelados, una pizca de sal, cinco sacudidas de pimentero, una cucharada de orégano, otra de vinagre de vino blanco, zumo de un limón, y seis cucharadas de aceite de oliva o girasol. Removemos hasta que quede lo más homogéneo posible, vertiendo solo la mitad del aliño encima de la carne. Introducimos al horno y dejamos durante treinta minutos a doscientos grados centígrados. El siguiente paso es, sacar la bandeja con mucho cuidado,  dar la vuelta a la pata de cordero con mucho cuidado de no quemaros ni tirarlo. Y echar sobre la carne el resto de aliño que nos queda. Introducimos la bandeja en el horno con mucha precaución de no quemarnos ni tirar nada, para que se hornee otros treinta minutos a la misma temperatura. Pasado es te tiempo repetimos el proceso de dar la vuelta a la pata de cordero con mucho cuidado, dejándolo hornearse otros veinte o treinta minutos a doscientos grados. 


Si no tenéis unos raíles extraíbles en el horno que os permitan voltear la carne sin sacarla por completo del horno, sacadla con mucho cuidado con unos guantes de cocina, y colocadla sobre una tabla de madera gruesa. Así evitareis quemar la encimera.


sábado, 28 de julio de 2018

Puré de berenjena y rulo de cabra (para dos o tres comensales):

Otra de mis invenciones, en su momento me gustó bastante así aquí la dejo. 
Primero pelamos y troceamos dos patatas medinas (recordad lavadlas antes y después de peladlas), y cortamos los extremos de una berenjena grande y la cortamos en trozos también. Las reservamos en un cuenco, mientras en una cazuela mediana alta añadimos dos tazones de agua. Ponemos a fuego alto y una vez el agua comience a hervir echamos: una cucharadita de perejil, un comino molido y otra pizca de nuez moscada. Dejamos cocer a fuego medio cinco minutos para después añadir la patata y la berenjena ya troceados, junto con una loncha (de un centímetro de grosor) de rulo de queso de cabra. Ponemos a fuego alto, y cuando cueza bajamos a fuego medio, dejándolo así entre diez y quince minutos. Solo hay que remover cada cinco minutos, hasta que la patata esté bien cocida, (blandita al pincharla). Trituramos todo con la batidora en la misma cazuela, y como toque final añadimos un chorrito de aceite de oliva o de lino.


sábado, 21 de julio de 2018

Sobaos (dieciséis raciones):

Ni me acuerdo de donde encontramos esta receta, pero es sencilla y queda bien. 
Primero batimos tres huevos en un bol mediano, para mezclarlos con doscientos cincuenta gramos de mantequilla templada. Luego añadimos ralladura de un limón, doscientos cincuenta gramos de azúcar y una pizca de sal fina. Mezclamos una vez más hasta conseguir un resultado homogéneo. En otro bol grande echamos doscientos cincuenta gramos de harina con dieciséis gramos de levadura en polvo. Removemos bien y a continuación juntamos con la mezcla anterior del otro bol, debe quedar homogéneo también. Colocamos las tartaletas en las bandejas sin que estén completamente pegadas unas a las otras, rellenamos cada tartaleta hasta la mitad e introducimos la bandeja a la altura media del horno, estando  ya precalentado a ciento ochenta grados. Esperamos quince minutos ¡y listo!

viernes, 13 de julio de 2018

Acelgas con sofrito y huevo escalfado (para dos personas):

Esta receta la encontré en este enlace https://www.recetasgratis.net/receta-de-acelgas-con-tomate-y-huevo-58746.html  Yo hice esta versión y me encantó, las dos son muy buenas. 
Primero hay que tener un manojo de acelgas cortado y lavado (la cantidad suficiente para dos personas). Luego colocar una sartén mediana a fuego alto con un poco de aceite, en cuanto esté caliente añadir media cebolla pequeña troceada en cuadraditos, pimentar a nuestro gusto, y bajar a fuego medio. Mientras seguir troceando un ajo en trocitos muy pequeños, añadirlo a la sartén también, a continuación laminar un trozo de dos dedos de grosor de chorizo (de calidad) y luego cortarlo en rectángulos pequeños añadiéndolo de inmediato a la sartén. Remover cada cinco minutos los ingredientes que vamos echando a la sartén. Ahora coger un puñado con copete de setas (en este caso elegí dos champiñones y setas congeladas de variedad que son medianas y pequeñas en tonos marrones), los cortar en trozos más pequeños si hace falta. Y mezclarlos en la sartén, salando un poco los ingredientes y añadiendo un chorrito de vino blanco o clarete. Dejar freír cinco minutos para añadir después las acelgas, dejando freír otros diez minutos como mucho. 
Mientras, poner en una cazuela pequeña un vaso de agua a hervir, cuando comience a burbujear bajar a fuego medio-bajo, y echar un huevo (permitir que cueza sin remover para que conserve la forma). En cuanto esté en su punto (lo podéis dejar más crudo o más cocido), escurrirlo con mucho cuidado repitiendo el proceso con el segundo huevo. Repartimos las raciones en platos y ¡listo!, ya podemos disfrutar.


sábado, 7 de julio de 2018

Espaguetis con gambas y pimiento verde (para tres comensales):

Bueno, ahí va otra de mis improvisaciones sencillas con pasta, gambas y pimiento verde. 
Primero cortamos un pimiento verde mediano en tiras finas y cortadas a la mitad, junto con seis ajos en lonchas gruesas y luego en tiras también. Los freímos en una sartén a fuego medio sin llegar cubrirlos de aceite, y removiendo cada cinco minutos hasta que estén en su punto. Entonces escurrimos bien y reservamos en un cuenco. Mientras llenamos de agua hasta la mitad una cazuela mediana alta, añadimos media pastilla de caldo de verduras y otra media de caldo de pescado. Cuando comience a hervir, echamos tres puñados de espaguetis del tamaño de una nuez, y bajamos a fuego medio. Removemos cada cinco minutos, hasta que estén en su punto (pasados quince minutos).Repartimos la pasta en cada plato y reservamos. A continuación colocamos una sartén mediana con poco aceite y a fuego medio-alto. Una vez esté caliente el aceite freímos setecientos gramos de gambas descongeladas, lavadas y escurridas. Pasados cinco minutos escurrimos el exceso de agua que hayan soltado las gambas y las seguimos friendo, dando vueltas de vez en cuando para evitar que se peguen a la sartén hasta que estén en su punto. Ya tan solo es mezclar las gambas, ya escurridas, con los ajos y el pimiento verde fritos… Y repartimos a partes iguales en los tres platos con pasta. Yo en esta ocasión los aliñé con una pizca de: orégano, eneldo, cominos molidos, pimientas molidas y unas gotas de tabasco.


domingo, 10 de junio de 2018

Coliflor con verduras y bechamel (para tres personas):


Hace una semana vi una receta en el perfil de Google+ de karlly196427 Hernández (https://plus.google.com/photos/114063921357585556121/album/6553930491490381153/6553930495546006034?authkey=COTD_LHqr6r7Jw&sqid=111527958687813813360&ssid=8886d5c3-f028-4c6d-9034-acb058baaf77). Y me gustó la idea así que decidí hacer una versión de la receta más a mi gusto. 
Habiendo comprado una coliflor mediana-pequeña, retiramos las hojas que tenga estropeadas. Las que estén bien las troceamos en cuadrados, mientras que la coliflor en sí la troceamos en cogollitos. Y el tronco lo cortamos en pequeños rectángulos planos. Enjuagamos todo con agua y dejamos escurrir en un colador. 
Pasados unos minutos extendemos sobre una fuente de cristal rectangular grande (la típica para preparar los macarrones al horno), las hojas de la coliflor y el tronco troceados, con unas pizcas de: sal de escamas o sal fina, de nuez moscada en polvo y pimientas molidas. A continuación ponemos los cogollos, con media cebolla roja mediana troceada en cuadraditos. Volvemos  echar unas pizcas de sal, pimientas molidas y especias para pizza.
Ponemos el horno a ciento cincuenta grados centígrados en modo estándar (que dé calor por arriba y por abajo). Mientras troceamos un pimiento verde italiano mediano, y una berenjena mediana-pequeña. Los freímos en la plancha con poco aceite a fuego medio hasta que esté en su punto. Entonces escurrimos y apartamos. En cuanto el horno alcance la temperatura marcada introducimos la bandeja tal y como la teníamos preparada, a la altura del medio, en la bandeja de rejilla del horno, dejando media hora hornear. 
Ahora podemos comenzar a preparar la bechamel: echamos en una sartén mediana medio litro de leche entera, calentándola a fuego alto. Mientras llenamos hasta la mitad un vaso con leche. Y añadimos tres cucharadas con un poco de copete de harina, removiendo bien hasta conseguir una mezcla homogénea. En cuanto comience a hervir la leche de la sartén bajamos a fuego medio, echamos la leche con harina del vaso poco a poco, removiendo para evitar grumos. Seguimos removiendo constantemente un poco despacio hasta que la bechamel espese como un puré de patata. Entonces le ponemos unas pizcas de sal, nuez moscada molida y variedad de pimientas molidas también (a gusto pero sin pasaros). Y añadimos también el pimiento verde italiano y la berenjena fritas, mezclando todo bien. 
Habiendo pasado la media hora que tenía que estar la coliflor en el horno, y con cuidado de no quemarnos, repartimos la bechamel por encima. Y dejamos hornear a la misma temperatura otra media hora. Transcurrido ese tiempo, cortamos unas lonchas un poco finas de un queso suave  o curado que os guste. Colocándolas por encima y dejándolo otros cinco minutos en el horno para que se fundan. 
Quedará la coliflor un poco crujiente pero en su punto, y soltará agua así que no os preocupéis si por la parte de abajo de la fuente de cristal queda caldo. 


domingo, 3 de junio de 2018

Tarta de queso Philadelphia (ocho o diez raciones):

Esta tarta es sencilla y está bastante bien, pero no recordamos de donde la vimos. Probablemente en algún canal o blog de cocina. 
Desmenuzamos ciento cincuenta y seis gramos de galletas Fontaneda Digestive (o cualquier otro tipo de galleta que os guste), mezclándolo de  forma homogénea con ochenta gramos de mantequilla derretida. Lo extendemos de forma regular por el fondo de un molde para tartas, y dejamos enfriar durante diez minutos en el frigorífico. Mientras, cocemos cuatrocientos gramos de nata, ochenta gramos de azúcar y cuatrocientos gramos de queso Philadelphia. Lo mezclamos bien, y una vez rompa a hervir lo colamos con ayuda de un colador de malla de metal fina. Y lo ligamos con diez gramos de gelatina Royal en polvo tamizados, que una vez estén bien removidos pasaremos por el colador de nuevo. A continuación añadimos esta mezcla al molde de tarta con la base de galleta, esparciéndola de forma regular. Lo guardamos en el frigorífico durante seis horas sin cubrir. Una vez enfriada la tarta se puede dejar tal cual o añadir: sirope de frutas, mermelada, sirope de chocolate, caramelo líquido, fruta fresca troceada (lo que más os guste). 


domingo, 20 de mayo de 2018

Pasta de colores con verduras campestres y nata (para cuatro personas):

Bueno, otra improvisación sencilla pero que quedó buena. 
Primero troceamos: cuatro champiñones frescos a poder ser, dos puñados de espárragos trigueros y cuatro cabezas de ajo. Llenamos hasta la mitad de agua una cazuela alta mediana. La ponemos a fuego alto hasta que el agua rompa a hervir, entonces bajamos a fuego medio y añadimos: una pastilla de caldo de pescado, dos hojas de laurel, y las verduras troceadas. Dejamos cocer diez minutos y añadimos ocho puñados de espirales de pasta de verduras, removiendo cada cinco minutos durante quince minutos. Una vez esté cocida en su punto la pasta, la escurrimos mientras calentamos una sartén grande a fuego medio. Echamos una cucharada de aceite de oliva, un brick de nata de quinientos mililitros y la pasta con verduras escurrida. Dejamos diez minutos removiendo cada dos o tres minutos, y ya tan solo es servir las raciones y añadir pimienta molida a gusto de cada uno.


domingo, 13 de mayo de 2018

Tortilla de patata con coles de Bruselas y pimentón (para tres comensales):

Bueno, esta es una de mis improvisaciones que la verdad es que además de gustarme, me pareció curiosa.
Troceamos en pequeños cuadrados: media cebolla mediana blanca, otra media cebolla mediana roja, tres coles de Bruselas, y tres patatas pequeñas (ya peladas y lavadas). A continuación freímos a fuego medio y con el aceite justo la cebolla durante cinco minutos. Luego echamos las coles de Bruselas dejándolas freír con la cebolla diez minutos más. Escurrimos  bien de aceite y reservamos en un cuenco donde mezclaremos una cucharada rasa de pimentón, una pizca de sal fina, y seis huevos de la talla "L". Batimos bien hasta dejar la mezcla espumosa y homogénea. Y a continuación freímos a fuego medio y con el aceite justo las patatas, una vez estén en su punto escurrimos bien de aceite y mezclamos con el resto de los ingredientes. Volvemos a batir para conseguir una mezcla homogénea. Ya tan solo es calentar la sartén doble para hacer tortillas, añadir un poquito de aceite, y echar los huevos batidos con las verduras. Ponemos a fuego medio-bajo si queremos que se queme poco la tortilla, o a fuego medio si deseamos que esté más tostada por fuera. Si deseáis que la tortilla quede bien cocinada tenéis que dejarla más tiempo que si queréis que quede más cruda (o babosilla como se dice en España). 


lunes, 23 de abril de 2018

Judías verdes con patatas (para cuatro comensales):

Tengo por costumbre preparar las judías verdes en la olla a presión, pero en cierta ocasión probé a cocinarlas de esta manera, y me gustó más por el toque crujiente que adquieren las judías. 
Primero compramos en la frutería la cantidad suficiente de judías verdes para servir con patatas a cuatro comensales. Y una vez en casa: lavamos, cortamos los extremos, y troceamos en partes de tres dedos de longitud las judías. A continuación, cogemos una cazuela baja y algo grande, y cubrimos el fondo con una capa fina e aceite de oliva, dos cucharadas de sal gruesa, una cucharada de perejil, y un par de tazones de agua. Ponemos a fuego alto hasta que comience el agua a hervir, entonces añadimos las judías verdes y en cuanto entre en ebullición de nuevo, bajamos a fuego medio. Dejamos diez minutos mientras: lavamos, pelamos y volvemos a lavar tres patatas medianas. Las troceamos en tiras del tamaño de las de las judías verdes, y una vez hayan transcurrido los primeros diez minutos de cocción de las judías verdes, echamos las patatas en tiras. Vigilando y removiendo todo cada cinco minutos hasta que las patatas estén en su punto (en diez minutos más). Y ya tan solo es escurrirlo todo, guardar el caldo para cocinar otro día, y servir las raciones.


sábado, 24 de marzo de 2018

Canelones de espinacas y piñones (para cuatro comensales):

La receta de hoy la vi de casualidad en una revista esperando en la típica consulta del dentista, tenía buena pinta y la verdad es que acerté. 
Lo primero de todo, sacad las espinacas del congelador y meterlas en el frigorífico un día antes, en un plato o tupper, para que al día siguiente estén descongeladas. 
Al día siguiente, cocemos veinte láminas de canelones siguiendo las instrucciones de la marca, una vez listos los retiramos y colocamos extendidos y separados sobre unos  paños de cocina limpios. Luego ponemos a hervir en una cazuela cuatro tazones de agua, una vez entre en ebullición, añadimos cuatrocientos gramos de espinacas con dos cucharadas rasas de sal gruesa dejándolas hervir a fuego medio durante cinco minutos. Una vez cocinadas, las escurrimos bien y reservamos. Después troceamos en cuadrados una cebolla grande y la freímos a fuego medio en la sartén con poco aceite, removiendo cada cinco minutos hasta que esté en su punto o dorada (como más os guste). Escurrimos el aceite y reservamos, comenzando a preparar la bechamel. Añadimos leche fría en un vaso normal, diluimos en ella tres o cuatro cucharadas de harina, luego echamos en un cazo: un vaso de leche, un chorrito de aceite, una pizca de nuez moscada y otra pizca de sal gruesa. Y antes de que comience a hervir vertemos poco a poco la leche del vaso con harina diluida. Removiendo constantemente hasta que la mezcla quede del espesor deseado y sin grumos. Ahora ya podemos mezclar de forma homogénea las espinacas con: cincuenta gramos de piñones, doscientos gramos de atún en conserva bien escurrido y la mitad de la salsa bechamel que hemos preparado. Reservamos la mezcla y comenzamos a montar los canelones. Para ello primero extendemos una capa de tomate frito no muy gruesa en el fondo de la típica fuente rectangular de vidrio para hornos. El segundo paso es rellenar los canelones, llenando cada uno de ellos con dos cucharaditas de relleno extendido en hilera en la zona media de cada canelón. Los enrollamos con cuidado y los colocamos en batería en la fuente sobre la capa de tomate. Así hasta haber montado dos capas de canelones. Por último añadimos por encima lo que ha quedado de la salsa bechamel y rallamos un poco de queso semicurado de oveja o vaca, lo introducimos al horno ya precalentado a doscientos grados y lo dejamos hasta que se dore por encima.


viernes, 23 de febrero de 2018

Pollo al horno con cebolla, patata y miel (para siete personas):

Esta es una receta es una improvisación que hizo mi pareja hace una semana, y puedo decir que quedó genial. 
Primero ponemos en la bandeja del horno bien extendidas ocho patatas medianas-pequeñas cortadas en tacos, añadimos sal y un chorrito de aceite, y las metemos a asar al horno (previamente precalentado a doscientos grados) entre treinta o cuarenta minutos. Una vez casi asadas, las sacamos del horno añadiendo a la bandeja: dos manzanas cortadas en rodajas o gajos, dos cebollas cortadas en juliana y como condimento echamos una pizca de sal (a gusto de cada uno), medio vaso de whisky, zumo de dos limones, medio vaso de agua y cinco o seis cucharadas de miel. Por último sal pimentamos los ocho muslos de pollo y los colocamos encima de la verdura. Metemos todo a asar al horno a ciento ochenta grados durante una hora... ¡Y listo!

domingo, 4 de febrero de 2018

Caracolas de pasta con verduras asadas (para cuatro personas):

Esta receta la vi en una revista hace meses, y como me quedé con ganas de probarla le hice una foto a la explicación para hacerla en cuanto pudiese. La verdad es que mereció la pena, tiene un toque diferente a lo que suelo cocinar. 
Bien, primero ponemos el horno en marcha a ciento ochenta grados centígrados. Luego lavamos y troceamos en cuadrados del tamaño de las caracolas de pasta que hayáis comprado: un pimiento rojo mediano, un pimiento amarillo o verde mediano también, una berenjena mediana, y dos calabacines medianos. Cubrimos la bandeja del horno con papel de aluminio, extendemos las verduras, añadimos un chorro fino de aceite de oliva o de girasol sobre ellas, espolvoreamos una cucharada de perejil y sal-pimentamos a nuestro gusto (unas pizcas de cada, no os paséis). Removemos mezclando bien los ingredientes e introducimos en el horno, ya calentado, durante treinta minutos removiendo las verduras cada diez minutos (procurad no tardar mucho para que el horno no pierda demasiado calor). Ahora hay que lavar y cortar en cuadrados dos tomates medianos (del tipo que más os guste) y con dos ajos laminados, colocarlos en la bandeja del horno mezclándolos con el resto de verduras. Dejamos hornear durante veinte minutos más, removiendo cada diez minutos. 
Mientras se hornean las verduras, cocemos ocho puñados de caracolas de pasta cubriéndolas hasta con tres dedos de agua y dos cucharadas de sal gruesa. Ponéis a hervir el agua con la sal a fuego alto, y una vez entren en ebullición echáis la pasta con más agua si fuera necesario. Una vez rompa a hervir de nuevo, bajáis a fuego medio removiendo cada cinco minutos durante quince minutos. Escurrimos la pasta en un colador, y la mezclamos en una fuente con las verduras horneadas, dando un toque de orégano.



lunes, 8 de enero de 2018

Acelgas con merluza en salsa (para tres comensales):

Esta receta la vi en un recorte de revista y como tenía buena pinta decidí hacerla, y la verdad es que no me decepcionó. 
Bien, primero cortamos en láminas seis ajos y un puerro (previamente lavado), y freímos con poco aceite al punto. Luego los añadimos a la cazuela (baja y grande), junto con un tazón de agua, una cucharada de sal de escamas y media pastilla de caldo de pescado. Dejaos cocer cinco minutos agregando dos bolsas de cuatrocientos gramos de acelgas congeladas. (En el caso de ser acelgas frescas, las lavamos, retiramos las hebras y el principio del tallo, y las troceamos bien. Poniéndolas a cocer al mismo tiempo que los ajos y el puerro). Una vez comience de nuevo a hervir, esperamos de cinco a quince minutos (Hasta que las acelgas estén en su punto), añadiendo dos cucharadas de pimentón. Removemos hasta mezclar todo bien, y dejamos enfriar. Escurrimos en un colador fino para servir la ración correspondiente en cada plato. 
Lo siguiente es freír a fuego medio seis chalotas laminadas hasta que se doren, luego echamos: zumo de un limón exprimido, ralladura de cáscara de este, el culo de un vaso de licor (para un toque dulce) o de vino blanco (para un sabor un poco ácido). Y por último las tres rodajas de merluza dejándolas diez minutos por cada lado a fuego medio (hasta reducir la salsa). Repartimos el pescado con su correspondiente ración de salsa y chalotas… ¡Y listo!